Ganó la Libertadores con Boca y jugó en Europa, aunque se retiró para seguir ligado a la ganadería.
Ezequiel González supo ganarse un lugar en la historia de Boca Juniors no solo al consagrarse campeón de la Copa Libertadores, sino que también llegó para reemplazar el lugar que dejó vacante Juan Román Riquelme. Debido a sus grandes rendimientos, se ganó el reconocimiento de los hinchas Xeneize.
Tras su consagración en el club, tuvo una breve experiencia en Europa que no terminó de consolidarlo. A los 31 años decidió ponerle fin a su carrera como futbolista profesional y hoy disfruta de una vida tranquila, alejado de los flashes, al frente de sus campos.
Ezequiel González y su paso por el fútbol
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«Equi» debutó con la camiseta del «Canalla».
«Equi» González comenzó su camino en el fútbol en Rosario Central, donde se destacó por su calidad como volante creativo. Su nivel llamó la atención de Boca, que lo incorporó en 2002 para ocupar el lugar que había dejado vacante Riquelme tras su salida al fútbol español.
Si bien su paso por el club de La Ribera fue corto, logró dejar una imagen positiva. Disputó 27 encuentros, convirtió 4 goles y fue una pieza clave en el equipo que se consagró campeón de la Copa Libertadores en 2003.
Luego de su paso exitoso por Boca, González dio el salto a Europa para jugar en la Fiorentina. Sin embargo, no logró afirmarse en el fútbol italiano como se esperaba. También tuvo etapas en Panathinaikos de Grecia y Liga de Quito, donde cerró su ciclo como profesional. A los 31 años, decidió retirarse de las canchas.
Su vida después del retiro
Antes de retirarse, González ya pensaba en su vida post el fútbol. Invirtió en tierras y se dedicó de llenó a la ganadería con su empresa “El Cherú”, enfocada en la cría y producción de carne vacuna y porcina.
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